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El café es la segunda bebida más consumida en el mundo después del agua.
No te pierdas este artículo, si eres amante del café tendrás curiosidad por aprender todo sobre las características y cultivo del cafeto (planta del café) en casa.
De esta manera, podrás cultivar tu propio café en casa y prepararlo tu mismo para tu deleite. Eso sí, tendrás que ser paciente porque tendrán que pasar de 4 a 6 años para que puedas empezar a recolectarlo.
No vamos a obviar que es complicado cultivar el cafeto en casa, pero incluso aunque no llegue a darnos frutos, sigue siendo un bonito arbusto ideal para decorar tanto en interior como en una terraza.
La planta del Café tiene hermosas hojas ovaladas, ligeramente realzadas, de un verde intenso y brillante. Sus flores son blancas en forma de estrella muy similar a la flor del jazmín hasta incluso hasta su fragancia embriagadora es parecida.
Contenido del Post
Hablamos en esta ocasión de un cafeto de la variedad Arábica.
La variedad Arábica es originaria de Etiopía, por lo que está acostumbrada a crecer en el clima subtropical y no se puede cultivar en jardines de Europa del Centro y del Norte, también en muchas zonas de España es difícil llevar a cabo su cultivo en exterior.
Puedes encontrar las semillas adecuadas en una tienda especializada. Es muy importante cerciorarse de que provengan de cosechas recientes para que puedan germinar bien y puedan crecer de manera correcta.
También puedes comprar la planta ya germinada y adelantar así el proceso.
Hay que elegir un recipiente grande con agujeros para que pueda drenar el agua. Coloca una malla fina por encima de los agujeros y sobre ésta debes poner una capa gruesa de guijarros de arcilla , así aseguras un buen drenaje.
Utiliza tierra nueva de cultivo, que sea porosa para que permita el aireado.
También puedes hacer una mezcla de un tercio aproximado de tierra para macetas por dos tercios de tierra de brezo. Completa la mezcla con perlita (o vermiculita) para mantener cierta humedad en el suelo y facilitar al mismo tiempo el exceso de riego.
Deberás colocar las semillas a una profundidad de unos 4 centímetros.
En caso de tener ya la planta germinada, llena la maceta con la mezcla y monta tu cafeto. Acaba de completar a medida que avanzas alrededor del pie.
Para acabar tienes que realizar un primer riego, este debe ser generoso. Pero ten cuidado , hay que evitar que se encharque para que no enferme la planta.
Pincha aquí y podrás ver un video explicativo del proceso de cultivo de esta planta.
Para favorecer el buen crecimiento de tu planta deberás procurarle siempre una temperatura de 20ºC a 25ºC.
Se debe cultivar durante el invierno, pero también podemos hacerlo a principios de primavera es en esta época cuando se propicia el germinado debido a las temperaturas.
¡Todavía estás a tiempo de cultivar tú cafeto este año!
Durante el periodo de crecimiento del cafeto (finales de primavera y verano) tienes que fertilizarlo dos veces al mes con el agua del riego, ya que éste puede sufrir con facilidad «clorosis»
Tanto en invierno como en verano, debes rociar las hojas con agua desmineralizada cuando el aire esté demasiado seco, para mantener cierta humedad alrededor de las hojas y evitar la obstrucción de los poros.
Cuando veas que las puntas de las hojas se vuelven negras, es un signo de que la humedad ambiental no es suficiente.
El sustrato transplantado se debe cambiar cada dos años aproximadamente. También podemos aprovechar este momento para cambiar la maceta.
No olvidemos que el cafeto, como otras muchas plantas de interior, puede ser atacado por arañas rojas, cochinilla, minador, babosas y caracoles y pulgones entre otros..
Como ya te he comentado al principio del artículo, el cafeto empieza a dar los primeros frutos a partir de los 4 años mínimo.
Y su maduración es además de larga, entre 6 y 12 meses, en nuestras latitudes es muy complicada.
Es todo un reto, pero si tienes suerte en llegar a cosechar sus frutos debes hacerlo cuando se tornen de color rojo brillante. Es muy emocionante este momento si llega a buen puerto, claro. En el interior de cada cereza encontrarás dos granos de café. Los puedes tostar en una sartén o en el horno.
Para conservar los frutos una vez tostados debemos protegerlos de la luz y del aire en un bote hermético preferiblemente para que puedan conservar su sabor y aromas.
Ohhh, este blog tiene como un aura suuper reparadora, me ha gustado mucho